El Feng Shui. Vivir en armonía con las energías de la Tierra
El Feng Shui es una antiquísima técnica china que nos enseña a vivir en sintonía con las energías de la tierra, tratando a ésta como a un ser vivo. Nuestra casa es un reflejo de nosotros mismos. Por ello nuestro hogar, oficina o empresa, deben ser espacios bellos donde el Qi fluya en armonía; limpios, ordenados, ventilados e iluminados; donde nos sintamos cómodos, fuertes, seguros y llenos de vitalidad. En perfecta armonía.
“Todos los objetos que se van acumulando con el tiempo son energía estancada que no nos deja progresar (…) Al limpiar y ordenar nuestro hogar, negocio u oficina, nos deshacemos de todo lo que no necesitamos y nos crea obstáculos, para SUSTITUIRLO por energía nueva. Preparamos nuestra mente para recibir nuevas ideas, vitalidad, optimismo y aprovechar al máximo todo lo que la vida nos brinda”. Siria Grandet.
Dentro del Feng Shui Clásico, es muy importante que la energía de una propiedad fluya libremente, sin ningún tipo de obstrucción. El Feng Shui es belleza.
El hecho de acumular objetos, tener espacios desordenados y sucios, son emociones que hemos ido acumulando en nuestro ser con el paso del tiempo, emociones que llevamos arrastrando y no nos dejan avanzar; falta de orden en nuestra mente; todo lo cual nos crean obstáculos y caos en nuestra vida.
Por esta razón, se recomienda que por lo menos una vez al año se haga una limpieza general de nuestra propiedad. Limpiar a fondo los armarios, archiveros, escritorio, bodega, etcétera; tirar todos los objetos y/o documentos que no sirvan, regalar lo que no necesitemos y se encuentre en buen estado. Ya que todos los objetos que se van acumulando con el tiempo son energía estancada que no nos deja progresar.
Aun cuando se trata de una limpieza física y material, funciona a nivel energético. Al limpiar y ordenar nuestro hogar, negocio u oficina, nos deshacemos de todo lo que no necesitamos y nos crea obstáculos, para sustituirlo por energía nueva. Preparamos nuestra mente para recibir nuevas ideas, vitalidad, optimismo y aprovechar al máximo todo lo que la vida nos brinda.
El Yin y el Yang
En el Feng Shui se estudia el sincronismo de las fuerzas del Yin y el Yang, ya que es indispensable para hallar el equilibrio. El secreto de ello está en que cada una de estas fuerzas se opone a la otra, pero no puede existir la una sin la otra.
El Yin, equivale a la fuerza femenina, relacionado con lo frío, lo oscuro, la noche y la luna así como el Yang, es la luz, el sol, lo dominante, lo masculino. Tras un día viene la noche, y después otro día. El verano cede paso al invierno, y tras el invierno, otro verano. Así pues, el yin y el yang interactúan constantemente originando el cambio necesario.
La teoría de los cinco elementos
Además de la teoría del Yin y el Yang ,la teoría de los cinco elementos constituye la base del Feng Shui. En ella, estudian cómo relacionar entre sí los elementos de la naturaleza para crear y canalizar la energía positiva. Vamos a encontrar el equilibrio juntando los 5 elementos en cada estancia de la casa, nada en exceso sino en la justa medida.Coge una hoja y apunta los elementos que tienes en casa para hacer un balance de tu hogar. Descubrirás muchas cosas de ti mismo y de lo que puede fallar.
Estos elementos son:
- Fuego. Es uno de los elementos más poderosos, pero no puede existir por sí solo, sino que tiene que ir vinculado a algún otro elemento. Tiene que estar controlado en todo momento para no derivar en un exceso de su energía que podría ser fatal. Energía relacionada con el sector Sur. Representa la energía vitalista del verano que transmite fuerza y comunicación. El fuego lo que hace es subir y estimular la energía hacia arriba. Un poco de fuego nos va a dar el toque que necesitamos para nuestra vida social, para estar animados con ganas de vivir, de hablar y de salir. Mucho elemento fuego nos volvería acabaríamos irascibles, enfadados.Elementos “fuego”: Las luces (la luz natural del sol o artificial de velas y lámparas). Cuadros, figuras o imágenes de paisajes con luz o animales. Complementos de piel y tejidos como la piel o la lana. Formas de triángulo, pirámide o de cono. Tonos rojos.
Consejo feng shui: Pon más fuego cuando necesites trabajar la expresividad.
- Agua. Al igual que el fuego, es un elemento muy poderoso y que puede escapar de nuestro control. Elemento identificado con el Norte, y que bien canalizado, nos aportaría armonía y prosperidad. Su energía representa la energía que transmite el invierno. El agua nos va a dar movimiento hace que todo fluya más rápido, nos da ese toque necesitamos de estímulo. Un poco de agua está bien pero en exceso parece que todo se nos escapa de la manos, como que no podemos controlar la vida y no tenemos nada asentado, nos daría inestabilidad.
Elementos “agua”: Todos los elementos que contengan agua que circule (fuentes, estanques…), superficies reflectantes como cristales o espejos y todo lo que sea brillante. Formas redondeadas y amorfas. Tonos oscuros como negro, gris o azul marino.
Consejo feng shui: Incrementa el elemento agua cuando te sientas bloqueado y necesites un cambio y quieras que en la vida pase algo.
- Tierra. Para conseguir la felicidad en familia tendremos que estar en contacto con ella, y en casa, colocar algún símbolo que la identifique en uno de los sectores que le correspondan (Suroeste, Noreste y centro). Su energía representa la energía estable del centro de la tierra. Una casa de pueblo de piedra, adobe, de barro, ladrillo.. nos transmite estabilidad porque la energía de la tierra se desliza en el plano y nos hace asentarnos. Si tenemos pocos elementos tierra en casa vamos a sentir que la vida fluye demasiado deprisa y que todo se nos escapa, mientras que demasiada tierra nos va a dar la sensación de que nos hemos estancado, que el tiempo pasa y nuestra vida está siempre igual.
Elementos tierra: Formas rectangulares, cuadradas y líneas horizontales o superficies planas. Construcciones de piedra, barro, ladrillo y tejas. Objetos de cerámica y suelos de baldosas. Cuadros de paisajes con llanuras de campos o del desierto. Tonos tierra con amarillos y ocres.
Consejo feng shui: Aumenta el elemento tierra cuando necesites estabilidad en épocas de cambio.
- Madera. Cuyos rumbos son Este y Sureste. Relacionada con la aportación de éxito de lo material, y como las ramas de un árbol que crecen y se expanden, su energía representa la energía cálida de la primavera. La energía en la madera funciona igual que en un árbol, del tronco a las ramas la energía sube y asciende y luego es como si nos recogiera en un abrazo. Una casa entera de madera es acogedora y te dan ganas de quedarte. Un poco de madera nos da la calidez que necesitamos pero en exceso, tanto abrazo acogedor nos acabaría ahogando. Elementos “madera”: Muebles, suelos, puertas y complementos de madera. Imágenes, cuadros y motivos florales. Formas alargadas y verticales de líneas rectas como un árbol. Tonos verdes y azules.
Consejo feng shui: Aumenta elemento madera cuando quieras empezar nuevos proyectos.
- Metal. Elemento del Oeste y Noroeste. El potenciar su energía, nos ayudará a adquirir poder. Representa la energía del otoño. El metal concentra la energía, hace que miremos hacia un punto, nos ayuda a fijar nuestra atención en algo. Demasiado metal nos puede volver demasiado fríos, no nos da tranquilidad ni seguridad, incluso puede parecer que nos están observando.
Elementos “metal”: Todos los metales (plata, oro, aluminio, hierro, cobre…) cristales naturales, minerales y rocas de granito o mármol. Superficies irregulares y cuadros de olas y nubes. Tonos blancos y pastel.
Consejo feng shui: Incrementa el metal cuando necesites concentración, disciplina y liderazgo.
Si no te sientes bien en casa puede que tengas en exceso algún elemento. Por ejemplo, si estás deprimido puede que tengas mucho elemento agua, si te sientes ahogado o agobiado, estancado, sin trabajo o con una vida monótona igual tienes demasiada tierra, si estás harto o tienes un ambiente frío en casa puede ser que tengas exceso de metal o si estás sobreexcitado de fuego…
Recuerda que el secreto de la decoración feng shui para un hogar tranquilo está en la dosis.
La teoría de los 5 elementos del Feng Shui se basa en 3 tipos de ciclo: creador, controlador y destructor.
En el ciclo creador (en sentido de las agujas del reloj) cada elemento crea o alimenta al siguiente: Por ejemplo, el agua alimenta a los árboles (madera), la madera aviva el fuego, las cenizas del fuego son abono para la tierra, de ésta se saca el metal, etc.
El ciclo reductor, inhibidor o agotador (en sentido contrario a las agujas del reloj) mitiga los efectos de los elementos. Así, echar tierra sobre el fuego disminuye su llama, éste a su vez consume poco a poco la madera, la madera chupa agua, el agua corroe el metal, etc.
Por último el ciclo destructor, a veces también llamado controlador (la estrella interna) es más agresivo ya que destruye el elemento sobre el que afecta. Así, el agua directamente apaga el fuego, el metal corta la madera (ej. hacha), la tierra gana terreno al agua, el fuego suelda el metal, etc.
El Feng Shui suele utilizar los ciclos generador y reductor para equilibrar elementos en sus curas. Rara vez se usa el ciclo destructor, pues resulta demasiado agresivo. Por ejemplo, una estancia con demasiado metal se equilibrará con elemento agua antes que con fuego. A cambio, podemos potenciar un elemento (ej. metal) o bien con su creador (tierra) o bien con el mismo elemento (más metal).
Después de tener en cuenta todos estos consejos ya podemos ponernos !manos a la obra!. Pero recuerda que el proceso debe ser consciente. No tengas prisa.
Fuente: Feng Shui Espiritual.